martes, 13 de octubre de 2015

FASES LUNARES EN EL CICLO DE CULTIVO

La luna, esa gran dama blanca que nos acompaña todo los días y noches se vea en el cielo o no, e influye de manera determinante en el ciclo de los seres vivos y los elementos que les rodean. La luna durante su recorrido de rotación alrededor de la tierra recibe los rayos procedentes del sol, debido a ello se ve con diferente forma, esto son las fases lunares. El paso de la luna por todas sus fases dura 29 días y medio.




Las diferentes fases lunares influyen en los cultivos de muy diversas formas y son un aliado excelente para mejorarlos. A continuación explicaremos como cada fase influye en nuestras plantas:

-          Primer período: De Luna nueva a cuarto creciente:

En este período en el subsuelo se producen, entre otras cosas, grandes movimientos de agua que afectan directamente al cultivo, la disponibilidad de luz lunar va en aumento y las plantas tienen un crecimiento balanceado, en el que se favorece el crecimiento de hoja y raíz.

Germinación: Al haber mayor disponibilidad de agua en el suelo, las semillas de germinación rápida, tendrán la oportunidad de absorber agua más rápidamente y germinar en el tiempo previsto, siempre y cuando las restantes condiciones de suelo y clima sean favorables. Debido a esto, las semillas de germinación rápida se deben de sembrar dos o tres días antes o durante la luna nueva germinan más rápido y en forma más homogénea que aquellas que se siembran en otros períodos.

- Segundo periodo: De cuarto creciente a Luna llena:

En este período sigue aumentando la luz lunar y hay poco crecimiento de raíces, pero mucho crecimiento del follaje. Las plantas cuentan con una mayor cantidad y movimiento interno de agua.

Propagación vegetativo/esquejado: En este periodo no es conveniente cortar las estaquillas para hacer esquejes, ya que tienen mucha agua dentro de ellas. Por lo cual, las hormonas que promueven el enraizamiento (auxinas) estarán muy diluidas y no ayudarán a estimular la emisión de raíces. Además, el agua que está dentro de los esquejes tenderá a salir, provocando con ello su deshidratación.

Germinación: En este período las semillas sembradas anteriormente en Luna nueva que aún no han germinado, reciben un estímulo especial para que lo hagan.

Transplante: Cuando se hace el trasplante en este período las plantas tienden a crecer rápido y a producir mucho follaje.

- Tercera fase: De Luna llena a cuarto menguante:

Este es un período en el cual la luz reflejada por la Luna disminuye.

Trasplante: Este es un buen período para el trasplante y se ha visto un crecimiento rápido y vigoroso de raíces. Al existir poca cantidad de luz el crecimiento del follaje es lento, razón por la cual la planta puede emplear buena parte de su energía en el crecimiento de su sistema radicular.

Germinación: Durante este período se recomienda también la siembra de semillas de germinación lenta.

- Cuarta fase: de cuarto menguante a Luna nueva:

En este período la luz nocturna va en disminución. Se ha observado un lento crecimiento del sistema radical y foliar. Se considera que este es un período de poco o muy poco crecimiento, casi de reposo, en donde las plantas se pueden adaptar fácilmente al medio sin sufrir ningún daño. Por ello, es el momento óptimo para realizar labores en nuestras plantas, como pueden ser las podas.
Las podas y el corte de la madera deben realizarse en Luna Menguante o máximo en Luna Creciente debido a que estas prácticas dañan el corte de ramas y raíces. En esta época se garantiza una rápida cicatrización de las partes podadas.

Las plantaciones o trasplantes se deben efectuar, al igual que la siembra, preferiblemente en el período de los cinco días de influencia de la Luna Creciente y Menguante.

También hay cabida dentro de las fases lunares del control de plagas y enfermedades que se ven favorecidas en Luna Llena y Luna Nueva, pues en estas épocas se considera que el daño provocado a los patógenos es mayor.






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